PISOS VACÍOS

PISOS VACIOS

Una nueva ley, que previsiblemente se aprobará hoy en el Consejo de Ministros, establece que los inquilinos  que no paguen el alquiler dispondrán de solo 10 días para alegar ante el juez antes de ser desahuciados. Con la actual normativa, un arrendador debía recurrir a la vía jurisdiccional para obtener una sentencia de impago y proceder después al desalojo.

La actual normativa no estaba bien planteada. No solo para los arrendatarios, sino también para los inquilinos que no  disponían de ningún amparo legal para poder establecer contratos de larga duración o resolver problemas de las viviendas, por ejemplo con los alquileres de renta mínima.  Hay viviendas, ocupadas por ancianos sin recursos en muchos casos, donde los desperfectos e insalubridad de los edificios hacían la vida imposible a estos inquilinos sin que tuvieran ningún recurso para obligar a los arrendatarios a realizar reparaciones. Y los arrendatarios, en algunos casos, se lanzaron a utilizar hasta presiones ilegales para que se marcharan y recuperar unas viviendas que podían ofrecerles pingues beneficios si cambiaban el tipo de contrato de alquiler. La ley actual no resolvía estos problemas.

Pero la que se va a aprobar hoy, el Anteproyecto de Ley de Medidas para la Flexibilización y Fomento del Mercado de Alquiler, a instancias de la ministra de Fomento, Ana Pastor, es una ley sumamente restrictiva para los inquilinos. Y es injusta y demoledora para el momento que estamos viviendo. Si una hipoteca da lugar a un desalojo judicial, un alquiler da lugar a un desahucio exprés, y una subvención no se concede si se reside en la vivienda paterna… ¿qué le queda por hacer a una familia que se quede sin recursos hoy en día?

Si viviésemos en un país donde el mercado de pisos de alquiler estuviese saturado  y  donde comprar un piso ya no fuese posible, entendería un paquete de medidas destinadas a liberalizar pisos, ocupados o cerrados (me imagino, que es a donde se puede dirigir esta medida, si se entiende con carácter disuasorio para un posible inquilino problemático) para destinarlos a una fuerte demanda de alquileres. Pero no es el caso. En España hay muchos pisos vacíos, que ni se compran ni se alquilan. Y medidas como estas, basadas solo en desalojos y desahucios solo lograran que sean muchos más…

A.L.López