lunes, 29 de octubre de 2018

EL 'EMPEZOSE' DEL 'ACABOSE'

EL 'EMPEZOSE' DEL 'ACABOSE'

Imagen de RTVE

El ultraderechista Bolsonaro gana las elecciones en Brasil

Aún queda por analizar parte del escrutinio, pero parece que el resultado no se modificará sustancialmente. Bolsonaro ha ganado las elecciones en Brasil y será el próximo presidente de uno de los países más grandes y con más recursos del planeta. Y no es una buena noticia.

Llevamos ya muchos años en los que el auge de este tipo de políticas ultracapitalistas, ultraxenófobas, ultraantidemocráticas... están triunfando en las elecciones de todo el mundo. Pensábamos que era un cáncer de la vieja Europa, pero vino Donald Trump y triunfó en los EE.UU. Entonces pensamos que era un cáncer del viejo primer mundo, y entonces vino Duterte y triunfó en Filipinas... y ahora Bolsonaro triunfa en Brasil. No es una moda. No es un descontento de un tipo de política nacional. No es falta de democracia, porque en realidad todos esos triunfos se han debido a la urnas. Las pseudodictaduras capitalistas están triunfando en las urnas. No quiero creer que se haya encontrado la forma de amañar comicios para un determinado candidato... No quiero creer que a estas alturas de la historia haya una mayoría de personas tan idiotas como para sancionar con las urnas un tipo de gobierno casi dictatorial y casi fascistoide. No quiero creer una deriva tan sucia de un modo de gobierno en sociedad como es una democracia electa. La verdad es que no se que creer de este mundo que nos ha tocado vivir.
 
¿De verdad nuestra escala de valores está tan dañada? Parece que hacer las cosas bien y denunciar corrupciones, encarcelar a los que prevarican o se enriquecen con dinero público, rechazar las prácticas políticas antidemocráticas, apartar toda esa basura de la vida pública, en definitiva, haya hecho que muchos ciudadanos rechacen a quienes defienden la democracia y los valores sociales y se declinen por una mano dura que a poco que uno piense con carta cabal se daría cuenta de que por un motivo u otro se acabará volviendo contra quien le da de comer. Es su propia naturaleza. O tal vez es que la propia naturaleza de la democracia sea lo que ya advirtió Aristóteles, que es la consecuencia defectuosa de la república y se acaba degradando hasta derivar en una demagogia que termina, de nuevo e indefectiblemente, en una monarquía autoritaria.

No es que sea un mundo de idiotas votando a dictadores por culpa de los que quieren, que queremos, una democracia limpia, real y social. Es el mundo de la Revolución de las Élites donde interesan más (y se les mima más en todos los sentidos) los idiotas que los informados. Una revolución que empezó a fraguarse con una idea de globalización dictada para acabar con el Estado de Bienestar que nunca se permitió desarrollar completamente. Es un mundo globalizado, neoliberal, injusto con las clases más precarias de la sociedad (e incluso con las hasta ahora denominadas "medias"), pero muy productivo para las élites. Es el mundo que viene, el mundo que ya se está instalando, el que hemos dejado que se instale... No se si podremos hacer algo más de lo que hemos hecho ya para tratar de evitarlo. Tal vez no podamos, o no debamos... Ya sucedió con la Revolución Burguesa y con la Revolución Obrera. Son empujes, olas que una vez que se ponen en marcha solo frenan cuando encuentran una playa cómoda donde depositar su carga. Y ahí se queda hasta que llega otra ola. 

Nos ha tocado vivir el "acabose" del mundo que conocemos y el "empezose" de esa nueva ola de empuje neoliberal y ultracapitalista que se está fraguando a golpe de (viciada y violada) democracia. Que el futuro nos coja confesados, porque ningún Dios quiere saber nada ya de nosotros.
AlmaLeonor_LP

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