jueves, 12 de septiembre de 2024

TEMPORADA DE HUNOS

 


Las puertas se abrieron repentinamente. Nacho, el recepcionista, recibió el bofetón del bochorno marbellí y la bien aclimatada recepción, el alboroto propio de la “temporada de hunos”, como llamaba al periodo estival. Esperaban a esa familia desde primera hora. Maldijo entre dientes que llegaran quince minutos antes de acabar su turno.

Papá, ¿dónde está la piscina?

Espera, hijo… ¡Buenos días, joven!

“Mal empezamos”, pensó Nacho con sus casi cuarenta, realizando ímprobos esfuerzos por mostrarse amable en su horario, como obligaba la empresa.

Buenas tardes —remarcó—, ¿señores Álvarez?

Álvarez-Núñez, si no le importa —replicó una emperifollada señora. La típica esposa de familia de falsos posibles haciendo el veraneo. Nacho prefería mil veces los huéspedes que llegaban en otoño con su amante. Daban menos guerra.

Sí, familia Álvarez-Núñez —respondió a una complacida diva.

Papá…, la piscina.

Firme aquí, por favor. —Le indicaba el sitio con el dedo como a un niño de guardería. Eran demasiados los que no lo hacían debajo de la palabra “Firma”.

¿Nuestra habitación no estará en el último piso? —soltó de repente la esposa.

No señora

Ni en el primero, que se escucha todo el ruido de la piscina —escupió el hombre mayor que les acompañaba.

¡La piscina, papá! —gritó el niño de nuevo.

Sí, sí…

Estaba claro el papel de cada uno: el hijo, molestar; la mujer, aparentar; el viejo, criticar; el marido… tal vez desaparecer del mundo tras lanzar una bomba atómica. Nacho empezó a sentir lástima por él.

Su habitación está en el segundo piso, señor. Allí tienen los ascens

Nada de ascensores —volvió a interrumpir el anciano.

Buscaremos las escaleras, padre.

Están al lado del ascensor, señor —dijo, acudiendo en su ayuda. Sí, ese hombre merecía lástima.

Gracias, joven.

“O no”, pensó un cada vez más molesto Nacho.

Papá

Sí, sí… ¿Dónde está la piscina?

Todo recto, señor.

Gracias de nuevo. —Forzó una sonrisa al alejarse con todo el paquete veraniego y recibiendo el mudo agradecimiento del recepcionista por no terminar con un “joven”.

Su llave, señor. Feliz estancia.

Nacho aparentó su amabilidad. Aún faltaba un minuto para las tres de la tarde.

AlmaLeonor_LP

La convocatoria juevera de esta semana corre a cargo de HELICON, y la propuesta que realicé el pasado domingo a los jueveros era muy simple y la titulé CINCO PERSONAJES

Publicado en HELICON el 05/09/2024

LA PETICIÓN

Nioletta Tomas Carabia

Se levantó de la cama y comenzó a vestirse. Ella, aún desnuda entre las sábanas, suspiró adquiriendo el valor que necesitaba para decirle lo que llevaba días pensando.

—Dios me ha hablado.

Se volvió despacio hacia a su joven amante, apenas tenía veinte años. La vio contrita, asustada, cubriéndose someramente un cuerpo que desbordaba sensualidad y le quemaba la piel solo con saberlo a su alcance. Terminó de ajustarse el alzacuello blanco sobre la negra sotana.

—No blasfemes con eso. Dios solo me habla a mí.

—Pero…

—No sigas. Vístete, tu marido te estará esperando.

—¿Me amas?

—Claro que te amo, ¿a qué viene esa pregunta?

—No estoy segura… Creo que no me amas y tengo miedo de esto que hacemos. Me dijiste que me amarías como lo haría nuestro señor, que me acogerías en tu seno, que me harías olvidar lo que mi marido hace de mí… Y siento que sigo en el mismo pozo, en el mismo vacío. No sé ya quién soy, tengo miedo de que mi vida esté hueca.

—Viniste a mí y te amé. Dios lo sabe y también te ama. No temas. Él nos protege. Tu marido no lo sabrá. Cuando estés con él, déjale hacer. Y cuando estés conmigo pídeme lo que quieras que te haga. Quedamos en eso. ¿No te acuerdas?

—Pero Dios me ha dicho… Yo le he pedido…

—¿Qué le pediste? —Sentía tanta ternura por ella, la veía tan inocente, tan indefensa, tan influenciable que no podía reñirla por ese atrevimiento sacrílego. Era su posesión, solo suya, un regalo del cielo cuando ya sobrepasaba los cincuenta.

—Que me librara de este sufrimiento. Quiero dejar de percibir que no soy nada para nadie. Quiero que mi vida, mi existencia, tenga un sentido, que no sea solo un cuerpo vacío, que…

—¿Y él que te respondió?

—Que lo haría.

—¿Cómo?

—Me ha llenado de vida plena. Me ha dado un hijo.

Cuando ofició el responso en el entierro, todo el pueblo lamentó la temprana muerte de una mujer tan joven y hermosa. Su marido agradeció al párroco su comprensión y su consuelo.

AlmaLeonor_LP


Convocatoria juevera del 12 de septiembre a cargo de BITÁCORA LITERARIA, el blog de NÚRIA ESPINOSA. El tema de este jueves es: EL VACÍO EXISTENCIAL.

Publicado en HELICON el 12/09/2024

martes, 10 de septiembre de 2024

EL DILETANTE

 



El viejo físico volvió a comprobarlo ayudándose de su lupa. Era cierto, la caracola verde que le llevó su ayudante encerraba un ser vivo. No le creyó al principio. Dijo que se la había comprado a un marinero holandés que hacía la ruta del Caribe y comerciaba con objetos curiosos de aquellos remotos lugares: perlas, piedras cornalinas, caballitos de mar y otras curiosidades. Como esa caracola que encerraba un minúsculo cuerpo femenino. En su afán diletante, la golpeó hasta abrirla para examinarla mejor. Un avainillado aroma de orquídeas se expandió por la habitación mientras la sirena exhalaba su último aliento.

AlmaLeonor_LP

Texto incluído en el reto de septiembre del blog de Lídia ESCRIBIR JUGANDO.

Publicado en HELICON el 10/09/2024